jueves, 12 de abril de 2018
JUEVES EUCARÍSTICO
Jesús Sacramentado que presente te haces en el ALTAR.
Ven y hazte presente en todas las Parroquias, especialmente,
las más necesitadas de ti. Hay comunidades parroquiales que no te conocen aún,
hay parroquias muertas, vacías porque no te conocen, pasan ante ti
y ni la genuflexión hacen pero porque no lo saben y nadie, nadie, bien por miedo
o por respetar y si la gente no cree pues no digo nada. Así van a un entierro, una boda un bautizo...
Pero no te han visto ni aún saben que estás ahí escondido ante el SAGRARIO.
Señor tu lo sabes todo eres nuestro Padre y ves en cada corazón; Te ruego
por todos los Sacerdotes pero especialmente por aquellos que debiendo hacerlo te ocultan, no enseñan ni te aman ni te adoran. Socórreles, auxilia a todas las Parroquias muertas y vacías y purifícalas, Oh Señor! Danos santos y buenos Sacerdotes y cuida de todo mal a tantos sacerdotes que están muy mayores en las Residencias Sacerdotales, los que están enfermos en su casa con algún familiar. Y cuida de todos los Pueblos para que si en una Parroquia no se pueda estar en oración al menos nos reunamos y en privado o cada uno en su hogar Tú Señor nos unas y sigamos orando unos por otros. Sigamos orando ante las dificultades firmes en la FE y llenos de ESPERANZA día a día. Bendícenos y guíanos a parroquias y a Sacerdotes donde tu estás y te haces presente para dar la comunión, para visitar enfermos, para compartir con todos los fieles y vivir en fraternidad. Concédenos la gracia de orar sin desfallecer. Sin preocuparnos ni agitarnos por el mal que se apodera y hasta toca la Iglesia, también nuestras familias. Oh Señor ayúdanos, necesitamos BUENOS Y SANTOS SACERDOTES.
Gracias Señor, gracias!!!
lunes, 9 de abril de 2018
GAUDETE ET EXSULTATE: Exhortación Apostólica sobre la llamada a la santidad en el mundo contemporáneo
Gaudete et exsultate: Exhortación Apostólica sobre la llamada a la santidad en el mundo contemporáneo
1. «Alegraos y regocijaos» (Mt 5,12), dice Jesús a los que son perseguidos o humillados por su causa. El Señor lo pide todo, y lo que ofrece es la verdadera vida, la felicidad para la cual fuimos creados. Él nos quiere santos y no espera que nos conformemos con una existencia mediocre, aguada, licuada. En realidad, desde las primeras páginas de la Biblia está presente, de diversas maneras, el llamado a la santidad. Así se lo proponía el Señor a Abraham: «Camina en mi presencia y sé perfecto» (Gn 17,1).
2. No es de esperar aquí un tratado sobre la santidad, con tantas definiciones y distinciones que podrían enriquecer este importante tema, o con análisis que podrían hacerse acerca de los medios de santificación. Mi humilde objetivo es hacer resonar una vez más el llamado a la santidad, procurando encarnarlo en el contexto actual, con sus riesgos, desafíos y oportunidades. Porque a cada uno de nosotros el
Ciudad del Vaticano
PRIMER SAGRARIO!
Primer Sagrario bendito
Que Dios eligió en María,
Primer Sagrario viviente.
Primer Sagrario de vida.
Dejo mi mente y mis manos
en este día bendito
que Dios me guíe e inspire
y en estos humildes versos
arrodillarme ante Vos
Madre de Dios y del Verbo.
Amada Madre María
Que fuiste llena de Amor
y en un SI y un HÁGASE
no te quedaste parada
tranquila o ensimismada,
sino echaste a correr.
A Isabel fuiste a prisa
con gozo y con prontitud,
TABERNÁCULO viviente
mujer, sencilla y valiente
que llevabas en tu vientre
al mismo niño JESÚS.
Hoy Madre ante Vos yo me inclino
me arrodillo y os Venero
por ser la Madre de Dios
y Madre del Universo.
Y en toda dificultad
hoy te ofrezco humildemente,
mi Pueblo, y cada familia
creyentes y no creyentes.
Y unido también te entrego
y a tus pies pongo una flor
por cada mal de este mundo
y por cada tentación.
Otra rosa yo te entrego
por todos los Sacerdotes
por Nuestro Papa Francisco
que siempre pide oraciones.
Y son tantas peticiones
que en un ROSARIO te ofrezco
aquí las entrego Madre,
ante Vos Madre las dejo.
Guíame allí en la Parroquia,
física o espiritualmente,
y más la que está en mi Pueblo.
Que siempre tengo en mi mente.
Manantial de agua sea siempre
CARIDAD, AMOR Y COBIJO,
SAGRARIO que nos impulse
a ser valientes y firmes
motores de amor en Cristo.
Amando a María Madre
Y a la Iglesia en unidad
Llevando paz a la tierra
en nuestro peregrinar.
Del cielo somos, recuerda,
y retornando a la Iglesia
será nuestro caminar
Que al Cielo y no al infierno,
de la Iglesia Madre Nuestra,
ALLÍ NOS CONDUCIRÁS. (MAIDA)
lunes, 2 de abril de 2018
domingo, 1 de abril de 2018
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